La maestra plasma en sus óleos y acuarelas la vida cotidiana de nuestro pueblo. En una melodía de ritmo y color nos lleva a través de su fantasía e imaginación a mundos mágicos e intangibles.

Su mirada capta a través de sus líneas la intensidad de un artista, la inocencia de la niñez y la pasión de ella misma. Su creatividad está manifestada por la variedad de sus obras y técnicas que domina.
Transporta el alma de quienes ha retratado, distinguiéndose su alta calidad en el pastel.