Miroslava Sternova Beka (Praga, Checoslovaquia, 1925-Ciudad de México, 1955). Tras abandonar su país natal debido a las persecuciones de los soldados nazis, viajó a Nueva York para estudiar arquitectura, pero fue en México donde mostraría sus dotes actorales y filmaría casi todas las películas que realizó en su vida. Su primera actuación fue en Bodas trágicas (1946), de Gilberto Martínez Solares, junto a Roberto Silva y Ernesto Alonso. Realizó importantes películas, entre ellas Ensayo de un crimen (1955), de Luis Buñuel. Alcanzó gran popularidad fuera de México debido a algunas cintas de terror, mismas que la convirtieron en una especie de fetiche para el público aficionado a dicho género. Dos de aquellas producciones fueron El monstruo resucitado y La muerte enamorada. En 1993 el cineasta Alejandro Pelayo presentó una película basada en su interesante vida y trágica muerte.