Es la biblioteca más antigua de la UJAT, y la única que se inicia como biblioteca pública. Fue inaugurada el jueves 12 de octubre de 1944 por el entonces gobernador del estado, Noé de la Flor Casanova, bautizándola con el nombre del prócer y literato cubano. En su origen estuvo ubicada en la esquina de las calles Ignacio Zaragoza y Francisco I. Madero, frente al Parque Juárez, donde anteriormente estaba la Confederación General de Trabajadores. Esta biblioteca ha sido desde su nacimiento un apoyo para los estudiantes y maestros de la Universidad. En sus inicios su acervo bibliográfico era de 4,688 volúmenes, más de 1,000 folletos y 2,122 periódicos y revistas nacionales y locales. Durante el gobierno de Miguel Orrico de los Llanos (1955-1958), la biblioteca pasó a ocupar el edificio donde estaba ubicada la Secretaría de Educación Pública, en la Calle Hidalgo 19, a un costado de la Sociedad de Artesanos. En 1959, por decreto, la Biblioteca Pública José Martí y la Biblioteca Justo Sierra del Instituto Juárez, se fusionaron y así la primera pasó a formar parte de la naciente Universidad Juárez de Tabasco, ocupando el lugar que hoy es su domicilio actual en la Calle Hidalgo 211, esquina con Arteaga, en el centro de la ciudad de Villahermosa. En 1991, bajo la rectoría de Fernando Rabelo Ruiz de la Peña se remodelan y acondicionan sus instalaciones y se le dota de equipo y mobiliario; se reinaugura el 16 de marzo de 1991 por el entonces gobernador del estado, Salvador J. Neme Castillo. Desde 1994 este centro cultural cuenta con el único laboratorio de restauración y microfilmación de la entidad, y con las colecciones denominadas Francisco J. Santamaría, Justo Sierra, José Martí, José Domingo Ramírez Garrido, entre otras, de igual forma tiene en su acervo un ejemplar de Las obras de Santa Teresa (1670) y uno de la Vida y Hechos del Ingenioso Caballero don Quijote de la Mancha (1732).